Una parte fundamental del tratamiento exitoso de la enfermedad celíaca es lograr un correcto diagnóstico lo antes posible, sobre todo en niños.
Para entender este proceso desde un punto de vista médico le pedimos a la Gastroenteróloga Pediátrica Dra. Andreína Guisande que nos aclarara algunas dudas que nos respondió en éste artículo.
¿Cuándo consideras que el pediatra tendría que derivarte a un niño para estudiar?
Son múltiples los síntomas y signos sugestivos de enfermedad celíaca (EC): desde alteraciones en la piel, del carácter o hepáticas, hasta las manifestaciones digestivas o la afectación del crecimiento, que son las más conocidas. Los pediatras deben tener presente esta enfermedad y el amplio espectro de sus síntomas para realizar los exámenes correspondientes. En algunas ocasiones es el pediatra quien los solicita y en otras nos envían al niño para estudio. Ambas opciones son válidas siempre que el niño sea bien estudiado.
¿Qué análisis se realizan cuando hay dudas que el niño sea celíaco?
Debe realizarse la serología para EC: los anticuerpos anti-transglutaminasa tisular de tipo IgA y la dosificación de IgA . De acuerdo al resultado de éstos puede ser necesario solicitar otros o no.
¿Cuál es el proceso a seguir para llegar a un diagnóstico?
Si los estudios en sangre son positivos o si los síntomas son muy sugestivos, es necesaria la confirmación con una biopsia intestinal (en algunas ocasiones más de una), en la mayoría de las situaciones. Hasta hace unos años era imprescindible realizarla, pero actualmente en determinadas situaciones especiales puede obviarse según nuevas recomendaciones.
Hemos escuchado que a veces un diagnóstico es “falso positivo” o “falso negativo”: ¿qué significa eso?
El diagnóstico de EC no siempre es fácil. En la mayoría de los pacientes se llega a un diagnóstico preciso con anticuerpos y biopsia concordantes. Con menor frecuencia nos encontramos con pacientes con situaciones menos claras como anticuerpos positivos pero biopsia normal, o biopsias intestinales con lesiones dudosas, o anticuerpos negativos pero síntomas y biopsia típicas de EC, etc. Estas situaciones requieren un estudio exhaustivo del paciente, incluyendo estudio genético. En ocasiones, con la evolución el diagnóstico se aclara.
¿Hay enfermedades autoinmunes asociadas a la EC que se puedan prevenir?. ¿Qué otras afecciones se deben chequear paralelamente?
La EC es una enfermedad autoinmune y puede asociarse a otras enfermedades con este mecanismo. No está demostrado aún que la dieta libre de gluten (DLG) evite la aparición de estas enfermedades. Sí se debe investigar la asociación con ellas en los pacientes con EC por lo que en forma periódica se chequean las más frecuentes: hipotiroidismo, Diabetes Mellitus tipo 1 y las afecciones hepáticas autoinmunes.