Quizás ya habrás escuchado hablar sobre el Ph de la sangre y acerca de los beneficios de una dieta alcalina, tanto para sanar enfermedades como para mantener la buena salud.
Aquí va una explicación breve, con palabras simples y fáciles de entender de Luana Hervier.
Comprender el asunto del pH es simple cuando lo ponemos en palabras y términos que reconocemos. En mi coaching siempre utilizo este mismo ejemplo para explicarlo: imaginate que tu cuerpo es una cocina. Cuando está limpia, impecable, las cucarachas pueden llegar a pasar, pero al ver que no tienen comida (ni por lo tanto de qué vivir) se irán o quizá ni siquiera aparecerán. En cambio, si tu cocina está sucia las cucarachas pasan y se quedan, ya que encuentran alimento y casa. Pues bien: Imaginate que algunos alimentos de tu dieta funcionan como suciedad en la cocina o comida para las cucarachas; lo que en nuestra vida serian todo tipo de virus, bacterias, etc. Si éstas tienen un medio sucio donde vivir, allí se quedarán y alojarán, generando síntomas y enfermedades. El medio o “cocina sucia” vendría a ser un medio ácido, y una “cocina limpia”, en cambio, uno alcalino. La escala del pH va del 0 al 14, considerándose un pH neutro el correspondiente al valor 7. Cuando el pH baja del 7, se considera un pH ácido y cuando aumenta de 7 se considera unpH alcalino. Para que nuestras células trabajen de forma correcta y apropiada, su pH debe ser ligeramente alcalino, entre 7,35 y 7,45. Por eso en todo momento la sangre se está autorregulando: es importante no sobrepasar este el PH y para evitar la acidez metabólica, o acidosis, garantizando así el buen funcionamiento de las células de nuestro cuerpo y una óptima salud.
¿Y qué tienen que ver la acidosis y las cucarachas?
La acidosis de nuestro organismo tiene relación directa con las siguientes enfermedades o dolencias: diabetes, hongos ‑por ejemplo, cándidas vaginales‑, problemas renales, sobrepeso, inflamación, migraña, cansancio, tendencia depresiva, problemas respiratorios, artrosis, dermatitis, etc. Lamentablemente la mayoría de la población, incluyendo a los niños, sufren de algunos o todos estos síntomas, productos de –entre otros factores- la acidosis. En 1932, el médico alemán Dr. Otto Heinrich Warburg, ganador de premio Nobel, dijo que para que haya cáncer, envejecimiento y enfermedades crónicas, debía existir dos condiciones: ACIDOSIS Y FALTA DE OXIGENO, ya que en particular las células cancerígenas han “aprendido” a vivir sin oxígeno.
¿Qué alimentos/bebidas/emociones producen acidosis?
Algunos ejemplos de los alimentos más consumidos: harina blanca, azúcar blanca, panificados, sal refinada, bebidas con alcohol, gaseosas, golosinas, aditivos (colorantes, espesantes, saborizantes, etc).También el exceso de carne, lácteos, huevos, café y tanto las emociones negativas como el estrés y la contaminación ambiental.
¿Qué alimentos/bebidas/emociones nos ayudan a alcalinizarnos?
Algunos ejemplos: frutas y vegetales crudos – siendo el limón de gran ayuda‑, germinados, semillas, raíces, algas marinas, superfoods. También alcalinizan las técnicas de respiración –por su oxigenación‑, realizar ejercicio, emociones positivas y sobre todo el amor… Como ves, podríamos evitar infinidad de malestares psicofísicos al igual que sanar enfermedades que se diagnostican como “crónicas” o sin esperanza de vida llevando con consistencia una alimentación alcalina junto a técnicas de oxigenación (que alcalinizan la sangre), la reducción del estrés y un manejo de nuestras emociones y del entorno contaminante (hasta donde uno pueda intervenir, claro). No se trata de extremos: se trata de ‑paso a paso- tomar responsabilidad por aquello que SI PODEMOS HACER y tenernos paciencia en este camino.
Fuente: http://greenvivant.com/2014/11/que-es-una-dieta-alcalina/